¿Qué es el vino ecológico? Nuestros especialistas te lo cuentan

Un vino joven ecológico debe reunir una serie de requisitos específicos para ser considerado como tal. Algunos de estos requisitos aplican al proceso de elaboración, sin embargo, no solo se deben cumplir estos parámetros en la fabricación. Además, ciertas condiciones aplican con relación a la tierra en la cual se cultivan los viñedos, así como en relación con las uvas y a la conservación del líquido.

Por ejemplo, los viñedos deben abonarse con productos orgánicos y naturales, de origen vegetal como orujos o sarmientos y de origen animal como estiércol y compost. Esto excluye la aplicación y el uso de abono de origen mineral. Además, un vino ecológico debe elaborarse con materia prima ecológica, eligiendo el momento de cosecha de la uva en fechas tardías. Así, se consiguen mayores concentraciones de antioxidantes, lo que supone una bebida más saludable para el organismo.

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Requisitos que deben cumplir los viñedos y bodegas

Los viñedos y las bodegas deben cumplir requisitos que los diferencien de los procesos y recursos tradicionales.

Se permiten tratamientos naturales y no tóxicos

La tierra debe tratarse con productos no tóxicos.

Se usan fertilizantes orgánicos

Como hemos dicho anteriormente, no se permite el uso de fertilizantes químicos o abonos de origen mineral.

Se prohíben ciertas prácticas enológicas

La concentración parcial por frío está prohibida, así como la eliminación del dióxido de azufre utilizando métodos físicos.

Se controla la adición de sulfitos

Estos vinos se caracterizan porque existe un control sobre la adición de sulfitos.

El vino joven ecológico

Se trata de vinos que pueden venderse el mismo año en que fue cosechada la uva. Para lograrlo, se embotella después de que la uva ha fermentado, por lo que no pasa por barrica. No se permite el tratamiento con intercambiadores de cationes, así como la desalcoholización parcial del vino o la eliminación del anhídrido sulfuroso por medios químicos. Se opta por productos orgánicos para nutrir la tierra, como estiércol, compost vegetal o la biomasa generada por el mismo viñedo.

No se permite el uso de fungicidas sistémicos, agrotóxicos, herbicidas o pesticidas de origen químico. Con estas medidas, se ofrece al consumidor la seguridad de que no está ingiriendo ninguno de estos componentes perjudiciales para su salud. En función de ello, los requisitos de su elaboración deben respetar el medioambiente y resultar beneficiosos para la salud de los consumidores, aun cuando se trate de un licor joven.

El vino crianza ecológico

Un vino crianza ecológico ha pasado por un proceso de envejecimiento durante su proceso de fabricación. Generalmente, se desarrolla en dos fases: en barrica y luego en botella. La fermentación se hace con las mismas levaduras existentes en el mosto. El vino crianza ecológico prohíbe el uso de organismos modificados genéticamente en cualquier fase del proceso de elaboración, lo cual no ocurre en la elaboración de este tipo de licor ecológico.

El máximo permitido de sulfitos es de 100 mg por litro en el caso de los vinos tintos. En el caso de los vinos blancos, es de solo 150 mg por litro. En los vinos tradicionales, esta cifra aumenta hasta 200 mg por litro en ambos tipos de vino. En este caso, el nivel máximo de sulfitos permitido también es muy inferior al de un vino tradicional. El tratamiento del vino ecológico por medio de la electrodiálisis es otra de las prácticas prohibidas.

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Vinos ecológicos, vinos de agricultura ecológica

Además de su excelente sabor, estos vinos son productos ecológicos y de gran calidad. La vendimia es manual y no se alteran los productos.

En síntesis, la agricultura usada para fabricar el vino joven ecológico ha sido pensada para satisfacer las necesidades de los consumidores interesados en ingerir alimentos de calidad y respetuosos con el medioambiente.

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